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domingo, 1 de diciembre de 2013

VAYA LÍO.

Los celos eran inminentes pero claro, él claramente nunca vería la realidad.
Parecía que no me conocía, era obvio que lo estaba. En su momento, esa plática resurgió de un estado de ánimo no muy grato, no me agradaba hablar sobre ello, o mejor dicho, sobre ella.
Aunque nunca tuvo ningún lío amoroso con ella, el hecho de que ante mis narices volteara tan indiscretamente, girando su cabeza como si estuviese siendo exorcizado... Tan solo para verla.
Era eso lo que me cabreaba...


Llevábamos mas que un par de semanas juntos y él aún era tan tonto como para no haberme regalado aunque fuese un triste ramillete de cilantrillos. Era tan frustrante el hecho de que mi actual novio no notara las claras y directas incitaciones a que me comprara una rosa, tan solo una, no pedía más.
Pero él nunca lo hizo durante este tiempo, ni lo hará por lo que puedo llegar a deducir...

¿Acaso era tan difícil asegurarse de tener detalles con la persona a la cual dices amar?
Los detalles son tan precisos para mantener a la otra persona interesada y que sienta que en verdad sientes lo que dices. Pero este capullo parecía no comprenderlo y no solo eso, se daba el lujo de no pagar la cuenta completa, el siempre iba a medias... Si tan solo lo supiera mi padre, estoy segura que no estaría para nada contento con eso, sobre todo por la historia que había tenido con mi antigua pareja...

El chico anterior pagaba hasta las servilletas, claro la evidente diferencia entre ellos es la siguiente; El anterior, tenía un buen trabajo, tenía un coche, le gustaban los lugares caros, las cosas caras, (y no es que este diciendo que al nuevo no), simplemente que el nuevo en cuestión no tenía empleo, era mejor en muchos aspectos o quizás en todos. Pero no tenía el ingreso que el anterior, éste en cambio, aún estudia, depende del fallo que su familia le mande, y por supuesto aunque no me importe en lo absoluto, no tiene coche.

Y no es que esté tratando de ponerlos en una balanza y compararlos, espero que no lo tome de esa manera, sería un verdadero fastidio tener que explicar y hacer que no se cabree por el hecho de poner lo anterior.

Pero la verdad es que, ¿A que mujer no le agrada que la consientan?
El hecho es que el chico nuevo, no entendía la indirecta que en los días rojos del mes el debería de atiborrarme de chuches... El simplemente parecía no entender a ningún tipo de insinuación que yo le hacía para que me comprara golosinas, aunque fuera unos mentos...
Y que fuera a mi casa a comer chuches y ver películas todo el día, al contrario el solo me decía que mejorara y ojalá no tuviese dolores y  el típico: "que mal que se te acabaran las golosinas cielo."
Vaya que podría ser un fastidio algunas veces.

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